Reforma integral de ático en Zaragoza (calle Miguel Servet)

El proyecto de reforma para esta vivienda se plantea de manera integral.
Partimos de una configuración inicial consistente en recibidor, salón comedor, dos dormitorios dos baños, cocina y terraza descubierta.
El cliente quiere una nueva distribución, por lo que una vez se aprueba el proyecto, se procede con los trabajos de derribo y demolición, incluidos falsos techos, alicatados y pavimentos. Se procede a continuación con el levantamiento de tabiquería y cerramientos, tapiado de carpinterías exteriores, pavimentado, revestimientos y falsos techos.
La reforma incluye la sustitución de fontanería (en el baño y cocina) e instalación eléctrica.
También instalación de caldera.
Se han realizado también trabajos de impermeabilización.

Tanto la puerta de acceso al ático, como las puertas de paso interiores, se han adaptado a minusválidos, por lo que se han modificado los cabeceros y estructuras.

Existía de origen un desnivel en la vivienda, por lo que ha sido necesaria la demolición del pavimento y suelo elevado hasta llegar al forjado de la edificación, y a partir de ahí, se ha recrecido y nivelado para posteriormente proceder a la colocación del suelo laminado en pasillo, salón, cocina y habitaciones, incluido el rodapié, con resolución de esquinas, uniones y encuentros.

Se ha realizado el suministro y montaje de instalación interior de fontanería para cuarto de baño y cocina, con dotación para inodoro, lavabo sencillo y plato de ducha, así como fregadero, lavadora y lavavajillas.

También se ha realizado el montaje e instalación de calefacción, incluido el suministro de radiadores en la vivienda.

Ha sido necesaria la instalación de red eléctrica completa de distribución interior del piso, para recibidor, pasillo, dos dormitorios, salón, cocina, baño, aseo y terraza.

Para ocultar todas las instalaciones, se ha colocado, en toda la vivienda, un falso techo continuo de placas de escayola, con repaso de juntas e instalación de accesorios y medios auxiliares.

Nada más acceder al ático, a mano derecha nos encontramos con uno de los espacios principales: el salón, con acceso a la terraza. Para lograr una estancia amplia y luminosa, se ha pintado el techo con pintura plástica lisa mate lavable en color blanco, y las paredes, una vez alisadas, se han pintado en un tono gris como elemento decorativo.

Para la carpintería exterior, tanto del salón como del resto del piso, se ha optado por la instalación de ventanas de aluminio anodizado con rotura de puente térmico y vidrio doble.

Como elemento de protección de entrada de lluvia, se ha formado un resalte en la puerta de acceso a la terraza.

La terraza de origen era por completo abierta. Se ha practicado un cerramiento parcial de perfilería oculta, que ha requerido trabajo de albañilería e impermeabilización de cubierta inclinada.

Para una adecuada evacuación del agua de lluvia, se han creado pendientes con mortero de cemento, instalación de sumidero de aluminio y modificación de la bajante de las canales de las cubiertas superiores.

Para el solado de la terraza, se ha colocado baldosa para exterior antideslizante con mortero de cemento y arena de río, incluido el rodapié, de características similares a la baldosa colocada.

A la cocina se accede a través del salón. Para lograr una máxima integración de ambas estancias y aprovechar espacios, se ha colocado una puerta corredera, mediante instalación de tabique auxiliar con estructura de armazón metálico con chapa grecada y malla metálica.

En la cocina se ha buscado el efecto blanco/negro y alguna gama de gris, con líneas simples y puras para conseguir un efecto armonioso en coordinación con el salón.
El mobiliario lacado en blanco, hace destacar la encimera en color negro con brillo.
El alicatado de las paredes, previo rascado y alisado, se ha realizado con azulejo de gres esmaltado, incluido cortes, ingletes y piezas especiales.
Se han suministrado también los electrodomésticos y la grifería monomando.

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Reformas

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